En el silencio es donde te hallo,
esperando la aurora,
impoluta y grácil...
Si me acaricias te sonrío cómplice,
enamorado y valiente,
laureado por tu luz...
Sólo entonces el presente es infinito,
el pasado se disuelve,
el futuro se revela,
en tu abrazo cálido y suave,
invertebrado...
Concilio en el sueño
el atardecer con mis ojos
en tu mirada arrulladora,
atenta a los sones
que mi alma derrama dentro,
en el efímero escondite de tus besos...
Es un hermoso poema. Sí que "tocó mi alma".
ResponderEliminarEnhorabuena, señor poeta.
Un saludo.